“Corrió, huyó, intento escapar de las garras de la muerte. Pero era inútil, él ya estaba muerto.”
Este micro-relato me lo inventé hace ya muchísimo tiempo, supongo que cuando me dio por leer a Borges, Monterroso, Cortázar y demás escritores con una gran tradición por el relato corto y lo mezclé con la literatura gótica.
Si os fijáis se parece al cuento aquel de la muerte en el mercado que hace ya tiempo escribí en el blog.
2 comentarios:
¿Era la muerte quien estaba muerta? ¿Trataba de escapar de si misma?
Mira, no habia visto yo ese punto de vista.
Realmente, era un hombre cualquiera, sin nombre.
Pero tu pregunta plantea otra, puede la muerte morir, es la muerte finita?
Creo que tengo que desayunar algo, ya estoy dewsvariando :P
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